En un esfuerzo por ayudar a una comunidad asediada, una escuela secundaria en Minneapolis decidió realizar una colecta de alimentos. Esperaban una participación modesta, pero lo que siguió fue más de lo que podrían haber imaginado.
Las miles de donaciones superaron con creces las 100 bolsas de comestibles que la escuela esperaba recolectar cuando publicaron su llamamiento por primera vez en las redes sociales; se compartió tan ampliamente que algunos de los donantes incluso procedían de fuera del estado.
“Las donaciones cubrieron cada centímetro de nuestro estacionamiento, el césped, en todas partes”, dijo a CNN la directora de la escuela secundaria Sanford, Amy Nelson. «También tuvimos que usar un parque vecino porque no teníamos suficiente espacio aquí en la escuela para apilarlo».
La comunidad escolar inicialmente quería ayudar a sus propias familias porque vivían en barrios donde las tiendas de comestibles estaban cerradas debido a los daños causados por las protestas.
“La fila de carros trayendo donaciones iba por cuadras y cuadras en todas direcciones desde la escuela. Y siguieron viniendo», Nelson le dijo a CNN. «Todavía no sabemos cuánto tenemos».
Cuando se corrió la voz de la increíble cantidad de alimentos que recibió la escuela, cientos de familias visitaron la escuela en busca de apoyo.
El fotoperiodista de MPR Evan Frost publicó un video increíble en Twitter mostrando la escena:
Esto comenzó a las 10 am. Es difícil captar la cantidad de comida que apareció en la Escuela Intermedia Sanford en una imagen. Es increíble y sé que esto está pasando en otros lugares de la ciudad. pic.twitter.com/DZLmEIJzYR
—Evan Frost (@efrostee) 31 de mayo de 2020
Gracias a la generosidad de tantos, los voluntarios de la escuela están trabajando con la organización de ayuda alimentaria sin fines de lucro The Sheridan Story para llevar donaciones a los necesitados de la comunidad de Minneapolis.
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Los padres, los estudiantes y el personal que no se habían visto en meses se encontraban entre los muchos voluntarios, y cuando se le preguntó qué significaba todo esto para ella, la directora Nelson apenas pudo contener su orgullo.
“Primero, con la pandemia, solo ver a algunos de mis estudiantes y padres y luego verlos unirse para hacer tanto bien, fue muy conmovedor de esa manera”.
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