Después de que Chris Person perdiera su billetera afuera de una tienda Publix, buscó en el área varias veces. Después de que su madre de 72 años caminó por el estacionamiento y revisó las imágenes de vigilancia con el gerente de la tienda, pero no encontró nada, perdió por completo la esperanza.
La billetera contenía su licencia de conducir, tarjeta de vacunación contra el covid-19, tarjetas de crédito, mucho dinero en efectivo e incluso una tarjeta de regalo que cualquier persona podía canjear fácilmente.
Al día siguiente, tres extraños se presentaron en su casa en Palmetto Bay, Florida.
Lucas Perry, de 15 años, había encontrado la billetera en el estacionamiento, que se había caído del bolsillo de Chris, y junto con su padre y su hermana decidieron conducir hasta la dirección de Chris para entregarla en persona.
Chris quedó impresionado por los valores que claramente Eduardo Perry había inculcado a sus hijos. Especialmente porque cada dólar de los más de $100 en efectivo todavía estaba en la billetera.
«Todos rechazaron mi oferta de quedarse con el dinero que contenía, solo querían hacer lo correcto, y lo hicieron», dijo Chris a GNN. «Eduardo estaba decidido a enseñar a sus hijos el impacto de un acto desinteresado y honesto, pero tengo la fuerte sensación de que estos dos adolescentes lo habrían hecho de todos modos».
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Ni siquiera miraron sus teléfonos.
Chris también quedó impresionado por la actitud respetuosa de Lucas y su hermana Maya, de 17 años.
Mientras hablaban de todo, desde Jimi Hendrix hasta la obra de arte de Lucas, los dos adolescentes «nunca miraron sus teléfonos».
«Descubrí que teníamos mucho en común, especialmente el amor por el rock clásico».
“Tengo suerte de conocer a esta familia maravillosa, dotada y talentosa. Lo sé porque he pasado mucho tiempo escuchando a Maya tocar la guitarra y cantar. Deja que sea con su hermosa y dulce voz».
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El fin de semana siguiente, Chris y su esposa compraron un televisor nuevo y decidieron que ya no necesitaban su sistema de sonido envolvente completo. Chris recordó que a Eduardo le gustaba mucho el audio de calidad, así que lo llamó y le preguntó si lo quería, y quedó encantado con la oferta.
«Curiosamente, un domingo dejan mi billetera en mi casa y el próximo domingo regresan a mi casa para recoger un sistema de sonido envolvente», exclamó Chris. «No puedo esperar a ver lo que depara el futuro».
«Hice tres nuevos amigos hoy. ¡Qué experiencia tan increíble!”
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